24/04/2024
Fireworks Simulator
Fireworks Simulator es un juego que nos permite convertirnos en expertos pirotécnicos creando increíbles espectáculos de fuegos artificiales en PC.

¿A quién no le gustan los fuegos artificiales? ¿A quién? Pues ahora podrás disfrutarlos a tu gusto en el PC gracias a Fireworks Simulator. Sí, sí, como suena –literalmente–, es un simulador de pirotécnico, con todas las de la ley, para que todos, grandes y pequeños, pese a los sustos de los pepinazos y el estruendo ensordecedor de las tracas finales, nos lo pasemos en grande creando coreografías de formas, colores y sonidos en el «cielo» del monitor de nuestro PC.

Fireworks Simulator para tu PC
Crear espectáculos pirotécnicos es peligroso y está reservado a los artesanos profesionales de la pólvora, o a todos los que se compren Fireworks Simulator.

Los simuladores están últimamente de lo más original. Cierto es que no hay nada que vaya tan lejos como Goat Simulator –aunque dale tiempo–, pero cosas como Fireworks Simulator no se dan todos los días. El título de Reality Twist, disponible en Steam, nos propone justo eso, convertir el PC en un enorme espectáculo de fuegos artificiales, diseñando sinfonías de luces, colores y tracas, y danzas de partículas en movimiento del modo más sencillo posible. Así que entrénate para empezar a oír a tus amigos soltar «ooh» y «aah» y dejarlos con la boca abierta, con un poco de habilidad y práctica.

Fireworks Simulator es, en realidad, un enorme editor en el que es posible controlar hasta el más pequeño detalle, desde las secuencias de lanzamiento de los diversos cohetes y tracas, hasta los colores, movimientos, cascadas y múltiples efectos que se pueden conseguir, marcando el ritmo, pausas, etc. de la coreografía de pólvora.

Uno de los apartados más atractivos de Fireworks Simulator, que además consigue resultados realmente interesantes, es la posibilidad de importar música, con tus melodías favoritas, para marcar el ritmo de los fuegos artificiales, además de luego compartir tus creaciones online con amigos. Vamos, que si alguna vez habías soñado con unir música y fuego, ya puedes hacer de El Danubio Azul una creación luz y color de la que Strauss se sentiría orgulloso, o bien decantarte por la contundencia del Feuer Frei de Rammstein, dándole tu toque personal.