¿Oléis eso? Napalm. Adoro el olor a napalm por las mañanas, sobre todo si lo que se lleva por delante es a gente tramposa. Los buenos señores de Daybreak Game Company, que hace no mucho se denominaban Sony Online Entertainment antes de independizarse, han tomado cartas en el grave asunto de los tramposos que plagaban H1Z1, su MMO de supervivencia. El resultado ha sido más que satisfactorio: 24,837 jugadores han sido baneados sin perdón del juego por aplicar cheats y arruinar la experiencia online de otros jugadores.
¿Qué trampas estaban haciendo estos indeseables exactamente? Pues veréis, estaban usando una cosita llamada ESP, una especie de trainer/mod/hack/cosa que daba a los jugadores unos poderes absurdos, pudiendo conocer la localización de otros jugadores, algo que arruina por completo la experiencia de un juego de supervivencia donde cada encuentro con un desconocido debe ser fortuito y puede ser mortal para ambas partes. Si uno de los jugadores va avisado a priori, menuda gracia.
Desde Daybreak han sido muy claritos y públicos con el asunto y han arremetido contra las webs que distribuyen el ESP y otros cheats para MMO online. John Smedley, presidente del estudio, ha dicho: «como orgulloso jugador de PC, estos sitios me repugnan» para añadir posteriormente que saben perfectamente quiénes hacen trampas y que iban a ser impasibles con ellos. Y así ha sido, la verdad.
Para que os hagáis a la idea de lo infernal que era jugar en H1Z1 contra un jugador que usaba ESP u otros trucos, os dejamos este vídeo de un idiota ‘trolleando’ a un jugador normal y corriente.