Need for Speed Most Wanted PC Windows

Need for Speed lleva casi 20 años poniendo en los PC diversión, competición y olor a goma quemada. En estos años es inevitable que algunas ideas hayan funcionado mejor que otras, lo que ha acabado derivando en que algunas de las últimas entregas de la serie empiecen a ser remakes. Éste es el caso de Need for Speed Most Wanted.

En esta puesta al día, firmada por Criterion, la tecnología gráfica se cimenta en el Frostbite 2 de DICE y se ha dejado de lado la parte más «humana», con aquellos vídeos protagonizados por actores que daban un aire más cinematográfico al juego. Sin embargo, la esencia de las carreras urbanas ilegales, el tuning, la competición pura, los desafíos de habilidad y todo lo que aparecía en el Most Wanted de hace siete años sigue estando presente.

En el nuevo Most Wanted Fairhaven es la ciudad que acoge tus hazañas como el piloto más buscado por la policía y las carreras en las que compites contra tus rivales. La mecánica es sencilla. Buscas carreras, desafíos y eventos por el mapa, los aceptas al llegar al punto indicado, y a correr. Puedes cambiar de coche a voluntad, prácticamente en todo momento, y la opción de aceptar desafíos de tus amigos está presente en todo momento, dado que siempre estás conectado a Autolog a través de Origin.

Need for Speed Most Wanted es muy directo en las opciones de tuning y cambio de coche, lo que le quita algo de ambientación comparado con el original, y el sistema de menús de Criterion es bastante farragoso. Pero la competición, que es el corazón del juego, es genial. Las carreras son un puro derroche de adrenalina y de habilidad al volante, y su calidad técnica es excepcional. Es pura pasión por la velocidad, y es algo que se agradece.