La realidad virtual es la última frontera del videojuego, de momento. Esto significa que hay muchos factores a tener en cuenta antes de dar el salto a ella, como es el hecho de tener que comprar un aparato nuevo para disfrutarla, pero también la adaptación al producto. Esto último parece estar siendo un reto importante para todos los implicados, pues desde Oculus hasta Valve están de acuerdo en que el mareo producido por la realidad virtual es un problema importante. Sin embargo, Valve no está dispuesta a tolerarlo.
En su presentación durante la Sush Play de Islandia, Chet Faliszek ha hablado del tema y ha dejado claro que pedir que la gente se adapte a la realidad virtual y las náuseas que produce no es una opción, que hay que intentar revolucionar e innovar en esta tecnología antes de exigir a las personas que se adapten a ellas y que no conseguir un producto sin mareos sería un fracaso. Según sus palabras, «tiene que funcionar a 90fps o la gente se mareará».
La solución según Faliszek es que los desarrolladores experimenten más y mejor con la realidad virtual, pues cambia cómo los usuarios «ineractúan y experimentan el mundo» «Porque un género haya estado 35 años entre nosotros no significa que vaya a funcionar bien en la realidad virtual. ¿Cómo te mueves? La locomoción es el gran problema. Quizá haya géneros que no deban existir más porque no funcionan»
La mejor frase de toda la conferencia, sin embargo, es la siguiente: «Los vidoejuegos han existido durante casi 40 años. La RV solo ha existido uno. Estamos al nivel de Pong ahora mismo». Sin duda, Faliszek está emocionado por el producto y la experiencia y quiere que sus compañeros y su competencia esté a la altura.