Papetura entra de lleno en la categoría de juegos artesanales, no porque se trate de un título indie, ni su estudio de desarrollo, Petums, esté formado por un hombre orquesta –Tomasz Ostafin– capaz de hacerlo todo él sólo, puesto que no es el primer caso. El concepto de artesanal en Papetura viene de ser un juego hecho a mano, al estilo de The Neverhood –o su heredero, Armikrog–, aunque en su caso el uso de la arcilla se sustituye por papel. Sí, papel, lo que da a eso del «papel protagonista» un nuevo y literal sentido en esta aventura realmente única.
Si eres fan del arte en los juegos indie, Papetura te va a dejar alucinado. El juego de Petums está en plena campaña de financiación, buscando en Indiegogo los 13.000 dólares que necesita para completar su producción. Para animar a los posibles inversores en su campaña, Petums ha lanzado una demo jugable –corta, muy corta, pero intensa– para Windows, Mac y Linux, aunque también es posible jugarla en el navegador, aunque limitada a una resolución máxima de 800 puntos.
En Papetura seguimos las aventuras de un papel, el protagonista de la misma, y su extraña mascota felina –bueno, tan extraña como él–, que arranca de una manera no menos extraña: siendo tragados por una ballena de papel. Y es que en Papetura, como hemos dicho, todo el mundo está hecho de papel: personajes, objetos, escenarios… Un trabajo impresionante que une tecnología y artesanía de una forma realmente inédita. Si consigue su objetivo de financiación el juego estará listo para 2016 y si aportas al menos 9 dólares conseguirás el acceso a la descarga digital del juego –si das menos, será una contribución por amor al arte, sin más–. Petums asegura que el juego ofrecerá unas tres horas de duración en su aventura. Es corta, sí, como la demo, pero desde luego es algo realmente único.
