Conclusiones y valoración del Razer Ouroboros
El Razer Ouroboros es un ratón gaming excepcional. Reúne todas las tecnologías disponibles y las aplica con eficiencia para proporcionarnos el máximo rendimiento. Nos ofrece un alto grado de personalización en lo fundamental, aquellos parámetros que pueden diferenciar el uso de un ratón dependiendo del tipo de juego con el que lo empleemos.
Si necesitas la máxima velocidad de reacción para un shooter como Call of Duty: Ghost, sube la sensibilidad del sensor en Synapse 2.0… Y si necesitas ocasionalmente una alta precisión para apuntar, baja momentánemente la sensibilidad con el conmutador al vuelo.
Igualmente si estás en Total War Rome II y quieres coordinar a tus legiones, cargando con la infantería, al tiempo que las catapultas hostigan al enemigo, tal vez necesites bajar la sensibilidad del sensor para ser más preciso inicialmente. Luego puedes volverla a subir para moverte con fluidez por el campo de batalla… ¿Ejemplos? Tantos como se te ocurran. ¡El Ouroboros, admite cualquier maniobra!
En segundo plano, aunque resulte más llamativo, quedan las opciones de ajuste de la geometría del Razer Ouroboros. Las aletas son una idea estupenda, pero el ajuste de elevación es mínimo y el de longitud tiene sentido para los que tienen las manos grandes y poco más. Sin duda se agradecen, pero seguramente muchos usuarios dejen el ratón como está por defecto y, en todo caso, sólo tendrán que realizar este ajuste una vez. En este aspecto, los R.A.T. de la gama Mad Catz ofrecen una variedad de ajustes mayor.
Finalmente, las prestaciones de autonomía y rendimiento de la batería se sitúan en un nivel de calidad estándar para este tipo de dispositivos. Van muy bien y funcionan correctamente. La posibilidad de conectar el ratón directamente al cable, no es nueva pero sí muy acertada. Te permite jugar, aunque sin la función inalámbrica, si el día anterior olvidaste dejarlo conectado en su dock.
En definitiva, si buscas un ratón para jugar a múltiples y variados juegos, que se adapte a usos muy diferentes, pero con el máximo de prestaciones, el Razer Ouroboros es, para nosotros, totalmente recomendable. Fácil de configurar, versátil y con un rendimiento impecable. Hay ratones gaming más asequibles y perfectamente válidos, por supuesto, pero en el Ouroboros encuentras características diferenciadoras con las que, si te tomas los de jugar en PC en serio, no te costará amortizar su precio.
NOS GUSTA 
- Formidable rendimiento del sensor y velocidad de respuesta.
- Características de personalización para el movimiento y la aceleración.
- Configuración Synapse 2.0 muy completa con un interfaz sencillo.
- Diseño versátil y ajustable, con una ergonomía estudiada.
- Modo inalámbrico o mediante cable mayado para evitar interrupciones por falta de batería.
- 11 botones configurables.
- El precio se ha moderado en canales retail, en unos 15 € menos (de los 150€).
NO NOS GUSTA
- A veces puede fallar por un instante la sincronización del sensor en modo inalámbrico.
- La autonomía es de 10-12 horas en la práctica y si no lo dejas en la base, seguirá descargándose.
- La batería tarda mucho en recargarse en la base.
- Los orificios de la parte superior dan cierta sensación de fragilidad y son susceptibles de acumular polvo y suciedad.
- Se echa en falta poder hacerlo más compacto.
VALORACIÓN: ●●●●●●●●●●
